Juan Andrés arrancó a jugar al futsal a los 11 años en Sirio. “Jugué ahí once años ininterrumpidos. Al principio estaba negado porque venía acostumbrado al fútbol de campo, pero después me enamoré de este deporte. Creo que gran parte se lo debo a Marcelo Nardone, que fue quien me llevó a ese club”, declaró.
Actualmente es jugador de la primera división de Rowing, y además es el entrenador de las categorías sexta, séptima y octava. “Siempre tuve ganas de trabajar con chicos. Estoy agradecido de que me hayan dado esta posibilidad. Fernando Cuerva, que fue mi DT de primera el año pasado, me ayudó mucho a poder concretarlo.”
Desde chico le gusta observar a los técnicos y prestarles mucha atención en lo táctico. “Creo que hoy soy una suma de todos los DT que tuve. Trato de igualar lo que más me gustó de ellos. De cada uno aprendí algo, incluso de mi entrenador actual”, comentó.
En la octava división están pasando por un presente extraordinario. El equipo llegó a estar 24 fechas invicto y se encuentra en los primeros puestos de la tabla. “Creo que la clave está en el compromiso y la responsabilidad. Intentamos darle prioridad al deporte, enseñándole a los chicos que la presencia de cada uno de ellos en los entrenamientos es importante, que esto es un grupo y todos son parte”, afirmó.
Además, explicó que en esa edad es fundamental motivar a los chicos para que se enganchen con el deporte. Según él, para lograr esa motivación hay que prestarles mucha atención y sobre todo hacerlos sentir importantes.
Acosta está a cargo de alrededor de 60 chicos, entre las 3 categorías que dirige. “Es algo que realmente me gusta y creo que tengo facilidad. Trato de llegarle a mis alumnos diciéndoles la verdad. Felicito mucho y también soy muy crítico, no les dejo pasar ni un detalle, ellos saben que cuando se les corrige es por su bien”, expresó.
En cuanto a las prácticas, manifestó que se hace hincapié no sólo en lo táctico, sino también en la parte física. “Una vez por semana entrenamos con el profe Jano todo lo que es coordinación, zona media y elasticidad”. Además, agregó: “Trabajo en conjunto con José Álvarez, Alejandro Rubiolo y Maxi Fe. La verdad que me ayudan muchísimo, son buena gente y saben mucho del deporte. Sin su colaboración sería todo más complicado.”
Otro detalle importante es la preparación de los arqueros. “Cada miércoles todos los arqueros del club, desde décima a primera, tienen un entrenador que les da trabajos en conjunto y ayuda a potenciarlos. Nos viene bárbaro porque los chicos van aprendiendo de los más grandes. En lo que va del año, la 8va fue la división a la que menos goles le convirtieron”, reveló.
Por otro lado, contó que disfruta mucho de la relación que tiene con sus alumnos. “Son una máquina de enseñar. Todos los días aprendo algo nuevo, hay veces que tienen respuestas a las preguntas más difíciles, y no me refiero solo al futsal.”
Respecto a sus objetivos para este año, aclaró: “En lo personal me planteé seguir aprendiendo. Y con respecto al plantel, la idea es que puedan crecer, que sean educados, respetuosos, y no se crean ni más ni menos que nadie. Recalcamos mucho los valores y siempre les recordamos que representan a un club.”
“Cuando empezó el año les pregunté a los chicos qué era lo que querían. Y ellos me expresaron su deseo de ser serios en todas las canchas, de local y de visitante. Eso ya lo conseguimos. Fuimos serios y competitivos durante todo el torneo e hicimos grandes partidos”, cerró.