Dominando y cediendo, sabiendo jugar esta clase de desafíos, el conjunto de Matías Lucuix fue determinante en las situaciones que tuvo y sacó adelante un semifinal muy dura, donde previo a ponerse en ventaja los guaraníes pudieron haber marcado, pero el gran trabajo de Nicolás Sarmiento y la oportuna aparición de los palos hizo que esto no sucediera: “Fue un partido muy duro, como es siempre con ellos. Nos conocemos mucho, sabemos las virtudes y debilidades de cada uno. Estos partidos que se definen por detalle es muy importante ponerse arriba en el marcador. Tuvimos momentos de gran juego y pudimos haber aumentado, pero también tuvimos momentos que sufrir y eso es lo valorable del partido”, mencionó Basile.
La eficacia fue una de las claves que marcó el rumbo del partido, y aunque supieron llevar hacia su mejor versión el encuentro, por momentos no la pasaron nada bien: “Si queres ganar estos partidos, estos torneos importantes tenes que saber sufrir. Nosotros creo que nos caracterizamos por eso, sino no hubieramos conseguido lo que conseguimos con esta camiseta. Es algo que tenemos positivo”.
Además, el jugador de Kimberley también contó cómo vivió los momentos más duros: “Son momentos, hay algunos donde fueron de ellos, otros de nosotros. Tuvimos nuestras chances, nuestros mano a mano. Son partidos parejos que se definen por detalles, por suerte pegaron en el palo y se fueron afuera”.
Si bien aún no se ha visto un estadio lleno, las expectativas son que mañana esté repleto y eso es un condimento especial según entiende Santiago: “Esperemos que el estadio esté lleno, a todo jugador le gusta jugar con un estadio así, de visitante, la verdad es que con todo en contra es más lindo. Sabemos que dentro de la cancha somos 5 contra 5. El que esté mejor, el que mejor haga las cosas, el que más obediente sea, es el que se va a llevar la victoria. Estamos acostumbrados a este tipo de citas, a este tipo de partidos, a este tipo de finales. Esperemos que saquemos lo mejor de nosotros y podamos coronar”.
El hambre de gloria fue una de las características principales de este grupo desde ya varios años y, siendo consciente de que el tiempo va pasando, comprende que son etapas especiales: “Son las últimas balas de muchos de los que estamos acá. Estamos defendiendo la camiseta de Argentina hace mucho tiempo. Cada torneo, cada partido que pasa hay que disfrutarlo, hay que vivirlo con mucha ambición, con ganas siempre de seguir creciendo, seguir apuntando a ganar todo”.
Mañana a partir de las 13hs se jugará la final en el gimnasio Sergio Luiz Guerra de Carlos Barbosa ante Brasil, que llega por primera vez a la última instancia de una competencia internacional sin recibir goles en contra: “Creo que le influye más a ellos que a nosotros. Todavía no tuvieron esa sensación de que le hagan un gol. Por ahí si nosotros le podemos meter un gol el desconcierto puede ser mayor. Trataremos de utilizar eso para que sea a nuestro favor”, expresó el “Cerebro”.
Periodista especializado en futsal.