El sábado pasado, muchos sueños que se originaron años atrás en calle Moreno, se hicieron realidad: Sagrado Corazón tuvo una temporada casi perfecta, se coronó en la segunda división y logró obtener su cupo para la Primera A en el 2022.
Lejana quedó aquella primera fecha del mes de marzo, dónde el “colegio” venció por 5 a 1 a Río Negro y arrancaba con las esperanzas intactas. Su capitán, Ariel Malvestiti, habló con CdF y comentó cómo se vivían aquellos momentos de inicio del torneo: “Sabíamos que iba a ser difícil, porque de todo lo que hacías lo único que importaba eran los últimos 5 partidos, pero lo pudimos revalidar. El torneo lo arrancamos bien y lo terminamos bien, y fuimos los mejores”.
Con buen juego y gran trabajo táctico, Sagrado logró pisar fuerte desde las primeras jornadas, hecho que pudo mantener a lo largo de todo el torneo regular: “Siempre mantuvimos el nivel, eso fue importantísimo. Nunca nos agrandamos, jamás, si sabíamos que éramos el mejor equipo pero que eso no nos iba a dar el campeonato”, dijo Malvestiti. El equipo finalizó en la primera posición de la tabla, con 29 unidades de 33 posibles e invictos, con diez victorias y un par de igualdades.
Llegada la zona campeonato, los de Federico Espósito comenzaron con el pie derecho venciendo a Talleres de Villa Gobernador Gálvez. Sin embargo, en su segundo encuentro, verían la primera derrota del año frente a Horizonte, por 2 a 1. “Después del partido que perdimos, dijimos que había que ganar todo, y así fue. Queríamos trabajarlo callados e ir a por todo. En ese partido que perdimos llegamos 18 veces al arco, y nos hicieron dos goles, pero siempre estuvimos convencidos”, comentó Malvestiti.
El resto ya es historia. Con victorias por goleada frente a Parquefield, El Luchador y Libertad, el conjunto del colegio quedó ubicado en la primera ubicación de la tabla, con 12 unidades y 26 goles a favor. “Este ascenso para nosotros significa todo, no solo el ascenso sino salir campeones. Lo más lindo de todo es que lo hicimos con los que arrancamos, el mismo grupo de amigos, y por suerte la mayoría dentro de la cancha o teniendo algún rol protagónico por fuera”, reflexionó uno de los goleadores del equipo, con 7 tantos.
Por último, Malvestiti recordó aquellos primeros momentos del 2016, dónde el futsal comenzó a foguearse en el Sagrado Corazón: “Todos estos años empezamos a aprender, ver a los mejores, y pensábamos siempre ‘¿Che, nos tocará algún día?’, y formamos un gran plantel, nos encontramos con Fede Esposito que nos dio la vuelta de rosca que nos faltaba, armó un equipazo, y ahora de repente estamos con expectativas puestas en mantener la categoría en la A”.
Por último, el capitán del equipo campeón no dejó de destacar su fe a la hora de jugar en esta temporada: “No quiero dejar de decir que es un equipo, plantel y club que tiene mucha fe en dios, que pone su esperanza ahí y que desde ahí sacamos nuestra fuerza”.
Periodista · Redacción en Cuna del Futsal · CM y redacción en Línea de Tres · Comunicación de WAP Esports