Hay quienes juegan al futsal durante muchos años y, por consiguiente, comienzan a dirigir cuando el físico no da más. No obstante, hay otros que se ven obligados a adelantar la segunda fase, por diversos motivos. En el caso de Marcelo Espinosa, director técnico de El Luchador, no pudo seguir disfrutando del deporte que ama por una grave lesión en el club de sus amores.
Espinosa comenzó a jugar el futsal en 1983 (en ese momento fútbol sala) en Echesortu, club donde se crió y del cual es socio vitalicio. Allí estuvo durante cuatro años, hasta que la disciplina se disolvió. Por ende, decidió ir a jugar a Rosario Central, con Jorge Crozzoli como DT, en donde logró el Campeonato de Primera División en 1987.
“En Central estuve un par de años, y luego volví al club de mi vida, Echesortu, donde en 1990 ascendimos de la C a la B”, contó Espinosa en diálogo con Cuna del Futsal. Sin embargo, a pesar de la alegría del salto de categoría, no todo fue color de rosas, ya que, en un partido en cancha de Bancario, Espinosa sufrió una grave lesión en su pierna derecha: fractura de peroné y cortadura de ligamentos internos y externos del tobillo.
“Estuve seis meses con muletas y afuera de las canchas durante un año. Una vez recuperado, intenté volver a jugar, pero ya no era lo mismo y decidí abandonar la práctica activa del deporte. Lamentablemente, tuve una corta carrera”, se lamentó el DT del El Luchador, que no pudo disfrutar del deporte durante más tiempo como jugador. No obstante, no se dejó estar y desde esa época viene nutriéndose como entrenador.
Su trayectoria como DT arrancó en 1990, cuando volvió a Echesortu. “La comisión directiva me propuso formar todas las categorías y coordinarlas. Comencé con compañeros del equipo mayor, pero, al sufrir la lesión, me hice cargo de todo el fútbol de salón de la institución”, explicó.
En Eche logró varios campeonatos en divisiones Menor, Cadetes y Juvenil, siendo esta categoría la de mayor cantidad de éxitos. Además, pudieron obtener el ascenso de la B a la A manteniéndose por años, llegando a jugar dos finales. También, en lo que respecta a nivel nacional de clubes, la categoría Juvenil se coronó campeón del Argentino, jugado en Rosario, y la primera división hizo lo mismo en Jardín América (Misiones).
“Finalicé esta etapa luego de 16 años, en 2006, cuando nació mi primer hijo y decidí disfrutar de la paternidad”, reveló el apasionado por Echesortu. Cabe aclarar que, durante ese período, tuvo otros roles dentro del futsal: en 1995 acompañó como ayudante técnico a José Luis Miljovicevich, reconocido DT de UNR y USAR, al Campeonato Argentino de Selecciones Provinciales, jugado en la ciudad de Río Gallegos, donde lograron el primer puesto; y en 1998 fue convocado por Juan José Capillo, para acompañarlo como ayudante técnico en un proceso de Selecciones Mayores y Juveniles que duró ocho años.
Este último elenco obtuvo el Campeonato Argentino de Primera (Corrientes), y dos Campeonatos Argentinos de Juveniles (Comodoro Rivadavia y Rosario). En el año en que la categoría Juvenil se coronó en Comodoro Rivadavia, se había estipulado que el campeón sería el representante de la Selección Argentina Sub 20 para jugar el Sudamericano a disputarse en la ciudad de San Pablo (Brasil), logrando, Rosario, el subcampeonato.
No tardó en volver
Espinosa se dedicó exclusivamente a la paternidad durante un año y medio, ya que en 2008 fue llamado por Juan José Capillo para formar las categorías 4ta, 5ta y 6ta de Regatas, siendo Capillo el DT de primera. Allí estuvo tres años y medio, pero a la par fue entrenador de la primera división de Rowing, en donde citó a Fernando Cuerva como ayudante técnico y DT de inferiores.
Finalizado su vínculo en Regatas, en 2011 Espinosa trabajó en Horizonte, donde dirigió la Primera, inferiores y fue coordinador general. En 2015, se fue a Tiro Suizo, en donde estuvo durante tres años. En simultáneo, en 2017 dirigió 4ta y 5ta de Sagrado Corazón, logrando con esta última categoría el primer campeonato del año y el campeonato final.
⇒ La llegada de Espinosa a El Luchador
En 2018, Espinosa tuvo otro parate en el futsal, aunque en un principio pensó que era el fin de su actividad en el deporte. “Me surgió una posibilidad de un trabajo mejor al que tenía y una posibilidad de estudio que no había podido hacer de joven. Así fue como dejé la dirección técnica, creyendo que había sido el final de mi carrera”, explicó.
Sin embargo, no fue así, porque en 2020 Espinosa fue solicitado por el Club Social y Deportivo El Luchador para ser el DT de la primera. “Acepté con mucho agrado y lo tomé como un desafío personal”, manifestó el conductor técnico de la institución de calle Lima.
Por último, Espinosa tomó la pluma y quiso expresar sus sentimientos al recordar su carrera. “Quiero que él/la o los/las que lean este artículo sepan que he vivido y vivo este deporte con muchísima pasión, y más allá de los logros obtenidos, me quedo con la confianza que todas las instituciones han depositado en mí, con el apoyo de todos los padres a lo largo de mi carrera, con lo que he aprendido de todos los que hayan sido y sean hoy mis alumnos, con la amistad y guía de Juan José Capillo, y con la amistad y el tipo de gente sin igual como Fernando Cuerva. Pero por sobre todas las cosas, me quedo con el respeto de todos los que me conocen en el ambiente, no como DT, sino como persona. Al futsal, eternamente agradecido”, concluyó.
Carrera como jugador
- Echesortu (1983-1987)
- Rosario Central (1987-1989)
- Echesortu (1990)
Carrera como entrenador
- Inferiores en Echesortu (1990-2006)
- Inferiores de Regatas (2008-2011)
- Rowing (2008-2013)
- Horizonte (2011-2015)
- Sagrado Corazón (2017)
- Tiro Suizo (2015-2018)
- El Luchador (2020-Act.)
Potterhead, sherlockiano y guardiolista ⚡🔎⚽