El día del padre es una fecha especial en el almanaque de cada año. Todos aquellos que tienen la fortuna de tenerlo en vida, aprovechan para pasar un grato momento junto a él, mientras que los que tuvieron la desgracia de perderlo, aprovechan para recordarlo.
En este día tan especial, desde Cuna Del Futsal nos propusimos dar a conocer pequeñas historias de padre e hijos, en este maravilloso deporte. En este caso, hablaremos de los Crozzoli. El mayor de ellos (Jorge), es un histórico de la pelota de medio pique. Actualmente y desde hace un buen rato, es el director técnico de la primera de Rosario Central, mientras que también es el entrenador del equipo femenino del Canalla y del seleccionado rosarino de mujeres.
El legado del DT canalla continuó, ya que sus dos hijos varones, Matías y Juan Pablo, también practican la disciplina. La familia Crozzoli está marcada a fuego por dos pasiones: el futsal y Central. “Mi relación con ellos en el deporte responde pura y exclusivamente a jugador/entrenador“, expresó el padre. “No mantengo ningún otro contacto por fuera de ese contexto. Es una regla tácita y explícita que nos imponemos, la que nos permite mantener la individualidad en los roles que ocupamos“, agregó.
En otro sentido, Jorge confesó ser “el mismo entrenador de siempre” y aseguró no hacer diferencias entre sus hijos y los demás jugadores del plantel: “No hay matices en ese sentido, ni zonas grises, tengo la sana y profunda convicción de que son deportistas igual que todos, juegan si entiendo lo deben hacer y no lo hacen si creo lo contrario. Para mi el interés grupal va por encima de todo nombre propio cualquiera fuera el mismo, eso lo saben todos y cada uno de los jugadores que dirijo“.
“Cuando tu viejo es el DT, sentís que tenés que dar un poco más“, le dijo a este medio Juan Pablo, el menor de los Crozzoli. “Soy un jugador más, cuando estoy bien juego, y cuando estoy mal no tiene miedo en sacarme. Jorge tiene la característica de no tener preferidos, para él todos los que estamos en el plantel somos iguales“, subrayó.
Matías (hermano mayor) coincidió en los conceptos de Juan Pablo. Mencionó la responsabilidad que conlleva ser el hijo del DT, y aseguró que el deporte los unió mucho a los tres desde hace muchos años. Además, vislumbró una tercera generación: “Ese mismo camino parece estar transitando mi hijo Valentín, que con un año ya va a ver los partidos, JA“.
“Compartir plantel con mi hermano y con mi viejo hace que las victorias se disfruten con un sentimiento aparte“, expresó Juan Pablo. Los hermanos coinciden en que el deporte los unió mucho, y que disfrutan más de los triunfos y las derrotas duelen en mayor proporción también.
Sobre la dificultad de dirigir a sus hijos, Jorge manifiesta que debe ser más incómodo para ellos que para él mismo, debido a su personalidad y a su manera de ver las cosas. Además, recordó que allá por el 2017, cuando asumió la dirección técnica del canalla, les dijo que no les iba a ser fácil jugar, debido a que su proyecto apuntaba a cambiar radicalmente al futsal del club, buscando profesionalizar cada área y hacerlo competitivo. “Ellos decidieron aceptar ese desafío y hoy todavía cumplen con ese paradigma, en ese sentido como entrenador y no como padre es algo que debo destacar y reconocer“, cerró.
Periodista deportivo. Productor de LT3.