En el marco del Día Internacional de la Mujer, en el que se conmemora en todo el mundo la lucha de las mujeres por la igualdad, el reconocimiento y ejercicio efectivo de sus derechos, Cuna del Futsal dialogó con diferentes protagonistas de nuestro deporte.
Así es que desde el diario digital líder de la disciplina, se tuvo una entrevista mano a mano con Magalí Pérez, reconocida árbitra de nuestra ciudad. Si bien por el momento dirige solamente en el ascenso rosarino, Maga participó, por ejemplo, de la terna arbitral que dirigió en los amistosos de la Selección Argentina cuando enfrentó en Rosario al combinado de Vietnam.
Para conocer más la intimidad de la colegiada, y de como se sumergió en un mundo considerado machista desde sus inicios, Cuna del Futsal le propuso un ida y vuelta de preguntas y respuestas para revelar miedos y motivaciones que llevan a una mujer a adentrarse en el futsal.
► ¿Cuándo y por qué decidiste ser árbitro?
Durante mucho tiempo me llamó la atención la labor del árbitro, trabajaba en un club y veía mucho futsal. Un día le pregunté a un árbitro como había que hacer pero no me animé. Después de tres o cuatro años, cuando dejé de estudiar, tomé coraje, fui, averigüé y desde el 2015 estoy acá, dirigiendo…
► ¿Encontraste algún obstáculo por ser mujer?
Ninguno. Desde el primer día me recibieron de la mejor manera. De hecho, cuando me decidí y fui a averiguar para comenzar, los árbitros estaban entrenando y me pusieron a entrenar con ellos.
► ¿Cómo ves la inclusión de las mujeres en el Futsal de nuestra ciudad?
Creo que es algo necesario. A mi, personalmente, me apasiona el deporte, y si hubiese querido jugarlo en lugar de dirigir, en ese momento no tenía esa posibilidad. El deporte crece constantemente a nivel nacional e incluir el torneo femenino en la Asociación Rosarina de Fútbol es parte de nuestra forma de contribuir a ese crecimiento.
► ¿Cómo te trata el ambiente, reconocido por ser machista?
Pensé que iba a ser peor, pero en lo que es Futsal hay mucho respeto. Siempre hay algún que otro desubicado, eso no se puede negar. Más de una vez me tuve que replantear si estaba en el lugar correcto, pero por lo general los jugadores, técnicos y padres nos respetan tanto como a nuestros compañeros.
► ¿Por qué elegiste el Futsal por sobre el fútbol de campo?
Más que nada por cuestiones físicas. Tengo algunas lesiones que no me permiten estar a la altura fisicamente de un partido en cancha grande. Pero, y relacionándolo con la pregunta anterior, en el fútbol de campo el ambiente es más machista que en Futsal. Ahí si que no te salvás ni un partido de que “te manden a lavar los platos”. Es duro, lamentable y hasta preocupante diría yo.
► ¿Qué es lo mejor que te dejó hasta ahora la profesión?
Difícil elegir una sola cosa. Ante todo, y creo que lo más importante, me deja personas. Conocí muchas grandes personas en este camino, amigos. Y sin dudas el arbitraje me dio un poco más de carácter y seguridad de mi misma.
► ¿Quien es tu referente dentro del arbitraje rosarino?
No diría que tengo un referente. Pero si voy “sacando” de cada uno lo que creo que es lo mejor e intento aplicarlo para poder mejorar en lo personal.
► ¿Qué aspiraciones tenés de cara al futuro?
No me voy muy lejos. Creo que siempre hay cosas que corregir, entonces lo que intento siempre es eso, seguir aprendiendo, seguir corrigiendo. Hoy me toca dirigir el ascenso y quizás mañana la primera división, la única idea fija es seguir creciendo, el resto llega sólo.
Para finalizar, Magalí analizó el contexto social que se vive actualmente, y la lucha feminista que se instaló desde hace un tiempo en nuestra sociedad en general: “Soy una mujer, de 26 años, que pasó por varios tipos de acosos y abusos en algún momento de su vida. Lo sufrí, estoy en contra de cualquier tipo de violencia, y sobre todo la machista”.
Luego, la jueza sostuvo: “Soy una mujer que si me tocara (siempre dependiendo de la situación) elegiría ser mamá, pero creo que no por eso deberían estar todas obligadas a serlo, o morir en el intento de no serlo. Soy una mujer, a la que le da miedo andar sola de noche en la calle, a la que no le gusta tomarse un taxi de noche sola en la calle, a la que le gustaría poder vestirse sin tener que pensar en las “guasadas” que me pueden llegar a decir”.
Por último, Maga expresó: “Mi mamá sabe que si me pasa algo, tiene que salir a romper todo (sic). Creo que hay una lucha necesaria, aunque después cada mujer tiene su manera de luchar. La lucha es necesaria. Yo me quiero libre. Nos quiero libres”.
Si vos o alguien que conocés vive alguna situación de violencia, llamá gratis al 144 desde cualquier punto del país o buscá algún centro de atención cercano.
Radio Boing. Cuna del Futsal