El inicio del 2019 en El Luchador tuvo como principal novedad la participación del plantel femenino, que disputó su primer torneo oficial en la Liga Rosarina y tuvo un rendimiento destacado.
El grupo se creó este año a partir de que Marina Santamaría, quien comparte dupla técnica con Mariano Miernau, tome la iniciativa para conseguir jugadoras y así poder conformar un grupo. “Hace tiempo hubo un equipo femenino que luego lamentablemente se desarmó. Por suerte este año logramos agrupar un conjunto de jugadoras muy interesantes”, comentó Mariano en diálogo exclusivo con Cuna del Futsal.
Miernau es entrenador de la institución desde los 16 años, le gusta que sus equipos sean buenos defensivamente y siempre intenta darle prioridad al orden. A la hora de jugar, su idea es ser lo más versátil posible y llegar al arco rival con rotaciones o movimientos simples.
“Nuestra función junto a Marina es instruir a las jugadoras en los aspectos tácticos y técnicos del futsal. Trabajamos los dos a la par y estamos muy contentos con el grupo”, agregó el entrenador, quien tuvo este año la primera experiencia al frente de un plantel femenino.
El Luchador realizó una excelente temporada, tanto en lo numérico como en nivel de juego, y logró adaptarse rápidamente a la Liga Rosarina. “Es todo mérito de ellas. Fue un torneo raro donde se jugaron 13 fechas en muy poco tiempo y hubo que ponerle el pecho. Nos tocó disputar hasta 3 partidos por semana y no fue fácil, sin embargo hicimos un campeonato bárbaro”, valoró el DT.
El cuerpo técnico se propuso a principio de año armar un equipo competitivo y lo consiguió con creces. “Salió todo muy bien. Formamos un grupo buenísimo y dimos pelea hasta el final. El equipo se destacó por la garra y los ovarios que tiene. Nuestras jugadoras sienten un profundo sentimiento por los colores y eso se nota. Además, son muy buenas técnicamente y algunas ya se conocían entre sí, por haber jugado en otros escenarios como cancha de 5 u 11”, afirmó Miernau.
“Me quedé sorprendido con el nivel que mostró el equipo en todos los partidos, creo que supo plasmar en la cancha todas las indicaciones tácticas que le fuimos haciendo con Marina”, manifestó. El ‘Lucha’ consiguió con el correr del campeonato un funcionamiento muy fluido y estuvo realmente cerca de coronar el año con un título, tras obtener 12 victorias en 13 partidos disputados.
Con respecto a las individualidades del grupo, comentó: “Tenemos jugadoras que marcan muy bien, otras que tienen gambeta y saben jugar a un toque, y también chicas con mucho gol. De hecho, fuimos el equipo más goleador del torneo”.
En relación al 2020, Miernau se mostró con muchas expectativas y expresó que la idea es que el plantel siga creciendo. Además, hizo hincapié en la importancia de hacer una buena pretemporada para encarar el año de la mejor manera posible.
Mariano siente un amor único por la institución: “Es casi todo para mí. El Luchador es militancia. Es terminar de trabajar y no ver la hora de ir a dar una práctica. A nosotros nos caracteriza la autogestión. Por eso pienso que este club es militancia de verdad, con un amor propio gigante”, cerró.