Todo listo en la costa. Rowing remodeló su cancha alternativa y la dejó impecable. Ahora la institución cuenta con dos terrenos de juego para la práctica del futsal. El trabajo fue impulsado por la subcomisión de futsal y apoyado por la comisión y las familias que componen el club.
Mientras esperan el retorno a la actividad, las personas que componen el futsal en Rowing no descansan. El club realizó una importante inversión y logró reemplazar la superficie de la cancha exterior del club, que se utiliza para entrenar como alternativa a la principal. Importantísimo en contexto de pandemia por la necesidad de ejercitarse en grupos reducidos y con distanciamiento.
“La cancha quedó hermosa, vamos a seguir usando la de adentro pero ahora se puede utilizar tranquilamente la de afuera también”, le comentó a CdF Franco Marchi, integrante de la subcomisión. Las medidas del campo de juego, del que se beneficia también el vóley del club, quedaron en 39x20m, es un poco más grande que la del gimnasio interior, que tiene 39x18m.
“El principal problema era el ocupacional, ahora con dos canchas se nos va a hacer un poco más fácil”, argumentó Marchi. El trabajo, que llevó 3 semanas, fue retirar la anterior superficie compuesta por baldosas (como se ve en la foto principal), deterioradas por el paso del tiempo, y dejarla igual que la cancha principal, de cemento alisado pintado con pintura antideslizante.
Aún la pintura no fue colocada, pero los grupos de vóley y futsal ya están aprovechando el renovado sector para entrenar. En el transcurso de la próxima semana se pintará y la restauración quedará completa.
Larga vida al rock.