Hace más de dos años, Horizonte perdió la máxima categoría y días atrás pudo regresar. Primero se encontró con un torneo donde no pudo cumplir sus objetivos, otro que fue suspendido a causa de la pandemia y finalmente cerró el 2021 de la mejor manera. Con un proyecto serio y trabajando de la mejor manera, los de calle Suipacha volvieron a Primera A.
Pudieron conformar un cuarteto de renombre al mando del equipo, donde ni más ni menos se encontraban Lucio Acuña como entrenador principal y, junto a él, Germán Testoni, Ezequiel López y Marcos Parma. Cada uno de ellos llegaba de distintas instituciones, pero pudieron formar una idea de juego que luego sus dirigidos pudieron plasmar en la cancha.
Por su parte, Franco Reynoso que es el capitán, comentó qué tanto significó el ascenso: “Es un premio al compromiso y al trabajo bien hecho por todos, desde los jugadores, cuerpo técnico, delegados, coordinadores, Comisión Directiva y hasta los hinchas. Este logro fue posible por los aportes de todas esas personas que cuando tuvieron que acompañarnos con lo que sea, lo hicieron. Más allá de devolver a Horizonte a donde pertenece y donde nunca se debería haber ido, lo que también nos queda a todos es la unión que se generó en el club, esto es una coronación de algo que sobrepasa lo deportivo y por eso estamos tan agradecidos y contentos”.
En la fase regular del certamen de este año finalizaron en la tercera posición con 21 puntos en 11 partidos jugados: 6 triunfos, 3 empates y 2 derrotas. Además, en esta etapa convirtieron 32 goles y recibieron 25.
“El balance es demasiado positivo”, aseguró Reynoso. Horizonte pudo encontrar una identidad y una regularidad a pesar de los altibajos comunes que casi siempre están presentes. Sin embargo, pudieron sobreponerse a eso y conformando un plantel con jugadores de comenzaron el año en reserva que, cuando les tocó debutar, lo hicieron de la mejor manera. Incluso, hasta en el último partido dos de ellos coronaron con goles para cumplir el objetivo.
A su vez, Franco contó que tienen un mensaje que pregonaron los jugadores y se lo apropió todo el club. El mismo es: “Todos los que formamos parte supimos entregarnos a la mística, el caos y la confusión de Horizonte”.
En la zona campeonato, Horzionte consiguió cinco puntos en tres encuentros jugados, con un triunfo y dos igualdades. Así mismo había quedado tercero, a dos unidades del puntero que era Libertad y a uno de Sagrado Corazón que ocupaba la segunda plaza de ascenso.
“Desde el arranque del torneo tuvimos muy en claro cómo teníamos que trabajar y el objetivo de todos era el mismo, eso nos llevó a que en todo momento tengamos confianza en nosotros, en nuestra idea de juego y en cada uno de los jugadores que les tocó participar adentro de la cancha”, afirmó el capitán.
A su vez, nunca consideró que estén confiados o relajados, sí que los impulsó volver a primera tomar cada partido como una final. “Bajo esa mentalidad sabíamos que lo íbamos a lograr”, destacó Reynoso. Cuando restaban dos jornadas para que concluya el campeonato, llegó lo mejor para los de Suipacha.
Los que venían en la cima, es decir los de calle Felipe Moré, cayeron en ambas ocasiones. Por el otro lado, tanto los del colegio como los dirigido por Acuña, triunfaron en ambas jornadas y sacaron boletos a la máxima categoría del futsal rosarino.
Acerca del retorno a Primera A, Reynoso remarcó: “Las expectativas son las mejores, creemos que el proyecto que el club tiene hace dos años está preparado para que esta vuelta a nuestro lugar sea la mejor”. Por último, sin miedo al éxito, concluyó: “Con la fe intacta en cada uno de nosotros y con la esperanza de que, tarde o temprano, podamos llevar a Horizonte a lo más alto”.
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