En noviembre se llevó a cabo el Torneo Provincial en el que participó la selección de la Asociación Rosarina de Fútbol, la Liga Cañadense, la Liga Departamental San Martín y Liga Santafesina. En el cual el conjunto dirigido por Marcelo López se consagró campeón. Entre los 14 convocados se encontraban Agustín del Rey y el arquero Martín Zampino, de Sirio. Cuna del Fustal dialogó con Zampino sobre la experiencia de ser convocado para el torneo y el presente en el club.
“Estar en la selección es un premio al esfuerzo que se hace durante todo el año”, afirmó Zampino ni bien comenzó el diálogo con CdF y en este sentido, agregó que desde “lo personal” que lo hayan citado es una “satisfacción gigante”. “Todos quieren estar y muy pocos tuvimos ese privilegio”, remarcó.
Para Martín, poder entrenar con la selección fue una “motivación extra” para encarar la recta final del torneo local. Sirio tuvo un año donde fue protagonista de la pelea por el descenso, pero se salvó en el segundo semestre.
En cuanto al torneo de selecciones, el arquero lo definió como una experiencia increíble y destacó que se formó un grupo humano bárbaro “sin diferencias y mucha buena onda”, deslizó.
El jugador de Sirio se tomó muy serio la convocatoria: “Fue fundamental para poder lograr el objetivo planteado desde el primer día, soy fanático del deporte y fue excelente jugar con los mejores de Rosario”. Zampino, entre risas, aseguró que le gustaría que haya más citaciones y que lo llamen.
Zampino puntualizó que el estilo de juego que pretendía el cuerpo técnico hizo que el ritmo de juego sea muy alto e intenso. Reveló que las ganas de quedar en la citación final hacían que no te relajares en ningún momento, “quizás en el club al estar tanto tiempo juntos se juega de otra manera ‘así como más de memoria’”, detalló.
Por último, Martín expresó que de la selección se lleva muchos amigos nuevos, añadió que es una experiencia que sin dudas va a estar entre las mejores que tuvo en el futsal, tanto en aprendizaje táctico como técnico y aseguró que jugar con amigos es una satisfacción y una alegría inmensa.
En el combinado rosarino, Zampino no pudo ocultar su felicidad por encontrarse con amigos y jugar con algunos que hacía tiempo no compartían cancha. “Estuvo genial”, culminó el arquero.
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