El arquero del club Tiro Suizo charló con Cuna del Futsal acerca del vibrante partido que definió su paso a la Primera A. Además, realizó un balance sobre el torneo y expresó la alegría por la que vive en estos momentos junto a sus compañeros. El club de zona sur terminó situado en la segunda posición, venció a Central Córdoba por 3 a 1 en la última fecha del torneo, y eso permitió que sean el próximo equipo en festejar el ascenso.
Natanael Filleaudeau comenzó hace cinco años a atajar vistiendo del tricolor, y actualmente tuvo la oportunidad de lograr una importante campaña. Fue creciendo a lo largo de los entrenamientos y logró ser titular del equipo recientemente ascendido.
Contó que se encontró nervioso durante el partido, lo cuál es imposible no sentirlo así. “Al principio estaba tranquilo, pudimos dominar el partido. El rival, sacando una o dos jugadas, no provocaron mucho ataque. Nosotros, por otro lado, siempre nos faltaba algo para concretar, no podíamos entrar y no nos arriesgábamos tampoco en la presión, en momentos del partido no nos ayudó”, explicó el arquero.
Con respecto al segundo tiempo, señaló que el equipo se vió más soltado, pero también hubo ocasiones donde rebotaba la pelota, y los nervios jugaban en contra. Por lo que finalizó diciendo: “Gracias a Dios la suerte estuvo de nuestro lado”.
Haciendo un balance del torneo, Natanael dijo que en la primera etapa se encontraron bastante firmes, con algunas bajas a lo último. “Siempre tuvimos altas y bajas pero el partido que nosotros dimos el puntapié, que sabíamos que estábamos decididos a dejar todo era el partido contra La Carpita, partido que fue fundamental porque veníamos de perder con Echesortu, que era un rival pero no esperábamos que nos iba a provocar ese daño”, añadió.
Las primeras fechas Tiro Suizo logró sumar de a tres, y el encuentro con Echesortu pudo haber sido un gran obstáculo para conseguir el ascenso.
También contó que una situación en contra que tuvieron fue que se llevaron a cabo los partidos en la misma semana, y eso fue una vuelta de página. “Nosotros cada tres partidos nos proponíamos de 12 puntos ganar 9, y así sucesivamente, y eso nos ayudó muchísimo en lo anímico”.
Concluyendo con las declaraciones, dijo: “Yo llegué hace cinco años y me acuerdo que en Tiro era un sueño lejano llegar a Primera. Hablaba con gente que estaba acá siendo parte del club hace dos años, y decía: “Imaginate si Tiro asciende“. Nosotros peleamos el descenso en Arofusa, cambiamos a Rosarina, tuvimos una actitud más competitiva, y así fuimos fortaleciéndonos, yo fui progresando mucho”.
Después del año, sintió al club como parte de uno, y añadió: “Me contagió una pasión hermosa que yo en mi vida sentí, y es algo que voy a estar agradecido siempre con mis compañeros, con el equipo, con el club, con todo, porque me regalaron algo que no me voy a olvidar nunca”.
Comunicación Social (UNR).