En el ascenso rosarino, los protagonistas viven el futsal con la misma pasión que aquellos que compiten al máximo nivel. En este contexto, la edad no es un impedimento para salir a la cancha cada semana en busca de la victoria. Pablo Moreyra tiene 38 años, defiende el arco de Latinoamérica y entrena todos los días como cuando era pibe. “No se me cruza por la cabeza dejar”, dice sin ningún tipo de dudas el arquero, que dialogó mano a mano con Cuna del Futsal sobre el presente del equipo y su trayectoria.
‘Pato’, como le dicen todos sus compañeros en Latino, jugó al fútbol desde chico pero recién en el 2016 quiso probar suerte en el futsal. “Mi experiencia en el deporte es acá, en Latinoamérica, el club que amo y llevaré siempre en mi corazón”, expresó en una clara muestra de afecto hacia la institución que le dio “otra vez la alegría de atajar”.
Moreyra se define a sí mismo como “un arquero al que no van a vencer fácil. A pesar de que soy consciente de mi edad, porque ya no tengo 20 años, todavía respondo bajo los 3 palos”, afirma. El ‘1’ considera que sus mayores virtudes son su concentración y sus reflejos, ya que su mente no descansa nunca: “Estoy siempre metido y llevando al equipo adelante”.
El experimentado arquero pasó por el equipo de veteranos del club, estaba atajando en reserva y hace poco se ganó la titularidad en primera. “El momento me iba a llegar. ‘Lala’ -Mariano Frutos, quien conduce el futsal en Latinoamérica- me lo decía y ahora voy a defender el arco con todo”, afirmó. Por lo tanto, aprovechó la oportunidad para “agradecerle a él, quien siempre me bancó y confío en mi. Él me apoyó para que me entrene sin importar la categoría. Me potenció a dar lo mejor de mi y trato de hacer eso cuando me toca atajar”, agregó.
El comienzo de Latinoamérica en la Segunda División B2 es más que promisorio, ya que se ubica en la tercera posición. ‘Pato’ opinó que deben ir “paso a paso”, aunque “el objetivo es el ascenso, eso ni duda”. Además, dijo que el torneo debe servir para “consolidarnos como equipo y también crecer grupalmente. Se formó un excelente grupo dentro y fuera de la cancha”, añadió.
El arquero de 38 años quiere seguir durante mucho tiempo más bajo los tres palos: “Quisiera jugar todo lo que pueda, atajar hasta donde me de el cuerpo. Todavía hay ‘Pato’ para rato, no se me cruza por la cabeza dejar”, expresó. Por último, Moreyra dejó en claro cuál es su gran deseo: “Quiero ascender con Latino y si eso pasa me prepararé para lo que venga, sea veterano, reserva o primera. Pero primero, por sobre todo esta Latino”, cerró.
Periodista, 25 años. Productor en Radio 2.
