El pasado 20 de diciembre de 2018 se entregaron los premios y una de las ternas que se entregó correspondió al Fair Play. En esta oportunidad, tales estatuillas se las dividieron entre Sagrado Corazón, El Luchador y Federal.
La cita tuvo base en el Salón de Actos del Colegio Sagrado Corazón. Uno de los anfitriones, Marcos Enzo Ferrari –que se desempaña como delegado del Futsal- reconoció que dicha distinción “es un reflejo de lo que queremos enseñarles a los chicos porque más allá del deporte también queremos formar personas”.
Uno de los momentos más importantes en la vida de Sagrado se vivió a mediados de 2018 con la inauguración de la cancha de Futsal en uno de los patios del Colegio. Arrancaron ideando la misma hacia finales de 2016. Durante el 2017 mediante diversas actividades, como rifas o bonos, pudiendo así conseguir el presupuesto para encarar las obras; para ver de esa manera el sueño hecho realidad hacia agosto del 2018. “Fue una alegría inmensa luego de tanto esfuerzo y sacrificio. La repercusión del resto de la escuela fue espectacular ya que desde entonces hemos recibido mayor apoyo y reconocimiento”, expresó Ferrari. Con todo lo expresado, esperan ver más chicos que se vuelquen a los deportes tanto dentro como fuera del terreno de juego para “poder seguir creciendo”.
“Agradecerles a todas la personas que nos apoyan y nos ayudan a crecer porque todos los que hemos pasado por la institución le tenemos un gran aprecio y hoy poder representarla de esta forma nos llena de orgullo y alegría”, cerró Ferrari sobre lo que espera y esperan poder ver realizado.
Luego del turno de Sagrado, subieron al escenario dos clubes en conjunto, cuya amistad ha perdurado a lo largo de muchos años, estamos hablando de El Luchador y El Federal. Uno de los símbolos del elenco de Calle Lima –donde dentro se pueden ver ambos escudos pintados-, Juan Manuel Dezorzi, contó que poder compartirlo “es algo muy lindo, importantísimo, se sintió muy bien”. Y continuó: “Estamos completamente seguros que hay un ADN que es el ADN de entender que si no estamos juntos somos muchísimos más débiles, de entender que somos del barrio y nos debemos para el barrio. Eso es el ADN que tenemos en común y quizá con la mayoría somos amigos de hace muchísimos años”.
En el plano deportivo, el cierre del 2018 se vivió a puro apoyo. El Luchador evitó el descenso y El Federal consiguió el ascenso. Así lo reflejó: “Cuando Federal venía puntero e invicto y nosotros no podíamos levantar cabeza, los pibes se acercaron, nos empezaron a hablar, llenar de aliento, nos juntamos a comer. Por otro lado empezamos a hacer amistosos, que en los cuales nos entrenábamos algunas cosas particulares. Es eso un poco, cuando uno viene para atrás necesita de los amigos que nos bancaron en todo momento”.
El 2019 encontrará a ambos clubes compitiendo en el Círculo Superior del Futsal. Ya se empieza a palpitar cuando llegue ese día y el fixture sea sorteado. Dezorzi, al igual que el resto de sus compañeros de equipo, lo entiende como cuando juega a la pelota, donde “ahí está la esencia”. “Sigue siendo en algún sentido como el partido que todo el barrio espera, como la fiesta del barrio también. Ya lo empezamos a palpitar con algunas cargadas, con algunos chistes. Está muy bueno y lo esperamos ansiosos entendiendo que en realidad es una celebración”, se refirió. En la vereda de enfrente, en el Rojo de La República coinciden con las palabras de Dezorzi. “No es un clásico. Es la fiesta del barrio, como dicen muchos de los chicos. Cuando se juegue ese partido va a estar el barrio unido. Va a ser una linda fiesta”, afirmó Farib Vallejos, uno de los capitanes; mientras que su entrenador Juan Cabrera dijo que será un “partido entre amigos, somos compañeros ya que compartimos muchos entrenamientos, muchos momentos por fuera de lo que es la cancha y es una alegría enorme que ellos hayan podido mantener la categoría y que se pueda reeditar el partido del barrio porque esto es una fiesta que toda la república espera”.
Por último, y no por menos importante, hubo momento para entender o buscarle algún secreto la amistad entre ambos para el resto. “Hay muchísimo laburo de años, de trabajar, de volver a entender que no hay barrera geográfica que nos separen, que en realidad necesitábamos revincularnos, necesitábamos relacionarnos. Y eso lo que se fue construyendo en el tiempo”, relató Dezorzi. Y concluyó diciendo: “Eso es lo que está construido, eso lo que construyen los jóvenes y también eso sin duda es lo que queremos para nuestro barrio”.
Periodista Deportivo. Hoy en día, en Cuna del Futsal, Redacción y Estadísticas; y en “Domingo Para Armar” por Radio 2. Apasionado por Deportes Olímpicos.