Martín Solzi comenzó la escuelita de fútbol a los tres años, que luego con el correr del tiempo pasó a fútbol de salón y futsal respectivamente. En su paso por USAR, el club que lo vio nacer, fue partícipe de los cinco títulos que obtuvieron en su historia, dejando una huella imborrable en la institución. Por otro lado, fue uno de los protagonistas en los ascensos consecutivos por parte de Newell’s en la vuelta a la competencia en AFA.
El reconocido jugador rosarino, luego de estar varios años en lo más alto en el deporte de nuestra ciudad fue convocado a una gira con la Selección Argentina, para jugar cuatro amistosos ante Brasil. Además tuvo un breve recorrido en la Serie B de Italia, como así también pudo cumplir un objetivo en su carrera que era jugar en la máxima categoría del futsal argentino. Se vistió de naranja, se calzó la camiseta de Villa La Ñata y por el momento jugó solamente un partido en el que convirtió dos goles.
Inicios en el futsal
En 1998, Martín empezó a practicar en la escuelita de fútbol en el club de calle Salta, donde también se desarrolló en las categorías formativas y posteriormente debutó en la primera división. “También hacía otros deportes a los cuales mis padres me mandaban todos los días para que tenga una vida social en el club, pero era el que más me gustaba en ese momento”, destacó el jugador.
Su paso por inferiores fue de manera interrumpida, debido a que en algunas oportunidades decidió ir a jugar fútbol de campo. Sin embargo, a lo largo de esa etapa obtuvo tres campeonatos.

En el primer semestre del 2009 obtuvo su primer título, en la sexta división. “El segundo nos tocó perder la final con Unión Americana, con muchos chicos que después me tocó enfrentar en primera”, remarcó el lateral. Al año siguiente, en quinta, cosecharía su segunda estrella tras ganarle una final a Regatas y, a raíz de esto comentó: “Enfrenté jugadores como Luciano Badosa, Ramiro Pozzi que incluso me tocó ser amigo, así que si lee esto, espero que no se enoje”. Por último, también con la quinta y en un torneo anual que ganaron de punta a punta, se consagró por tercera y última vez.
“Recuerdo un montón de técnicos, más que nada de los equipos campeones. Lo loco era que esos técnicos después fueron compañeros míos en la primera de USAR”, expresó Solzi. Los entrenadores que lo tuvieron a cargo fueron: Darío Leviton con Ben Winter en primera ocasión; Nani Miljovicevich al año siguiente; Kevin Garmizo y Damián Epsztein en la última conquista, que en ese momento ya los tenía como compañeros en el plantel superior. “Me marcaron todos, del primero al último, todos me han dejado algo”, explicó.
USAR 2011 – 2017
En mayo de 2011, cuando tenía 16 años recién cumplidos, debutó en la primera división frente a Provincial. “Fue hermoso, me acuerdo que los chicos me pelaron. Me tocó entrar faltando 5’’, porque no se podía hacer el cambio ya que la pelota no se iba y el técnico no quería arriesgar, me tocó entrar, no toqué ni una pelota y terminó”, recordó el ala.
Poco tiempo después de uno de los acontecimientos más importantes en su carrera, que fue su estreno como jugador en lo más alto del club que lo vio nacer, levantó el primero de los cincos títulos que consiguió con Unión Sionista. A su vez, vale aclarar que fue partícipe de todos los campeonatos obtenidos por el conjunto de calle Salta, más allá de haber tenido una actuación más destacada en los que alcanzaron los años siguientes.

Sobre dicha conquista, aludió: “El primero, me tocó jugar los últimos dos partidos, por ahí lo viví más como si fuera un hincha o parte del plantel, que jugador del equipo campeón ya que tenía 16 años y me tocó jugar poco. Jugaba regularmente en reserva y los últimos partidos me tocaron jugar en primera ya que al ser menor de edad, podía jugar en una o en otra, no en ambas. Fue algo hermoso”.
Posterior a esto llegaría el hito histórico más importante del futsal rosarino, que ningún elenco ha podido superar hasta el momento. USAR, sería tetracampeón de manera consecutiva, siendo que en los primeros tres los lograría de manera invicta. Martín fue uno de los pilares en las consagraciones, siendo el goleador absoluto tanto del conjunto al que representaba como así también en los campeonatos, a pesar de que en 2017 recién se reincorporaría en abril, debido a que estaba jugando en Italia.

→ Gol de Martín para sellar el cuarto título de USAR de manera consecutiva.
“No sé cómo definirlo realmente, creo que fue algo único que ha marcado una gesta histórica en el futsal rosarino y que todos los que jugaban en ese momento, y siguen jugando hoy o que ya dejaron de jugar, siempre recordarán ese equipo”, afirmó Solzi. “Hay veces que las opiniones al ser tan subjetivas, carecen de valor y lo que importan son los hechos, si te pones a repasar entre 2015 y 2017 en Rosario se jugaron seis torneos, cuatro con play off y dos sin: de los primeros, USAR siempre llegó a la final y ganó dos de ellos, sumado a los torneos largos que también salieron campeón, por ende en cuatro salió primero y en dos segundos”, sintetizó lo que fue la etapa de una aplanadora que dominó la disciplina en nuestra ciudad.
Hablando específicamente de la actualidad, señaló: “Jockey en este momento de alguna manera está repitiendo eso. Yo creo que lo de USAR en aquel entonces tuvo un plus, debido al altísimo nivel de los equipos que había. Me parece que hoy, son más los candidatos pero no están claros cuando arranca el torneo. En dicha época, Jockey, Newell’s, Regatas, Unión Americana y USAR peleaban todos los torneos de palma a palma, eran equipos muy competitivos”.
Siguiendo con la misma idea, concluyó: “En esa etapa había cinco equipos muy fuertes que peleaban todos los torneos y eso me parece que era más complicado para salir campeón. Hoy en día, si bien el nivel es más parejo entre todos los equipos, no hay algunos que sean superiores al resto que sea muy difícil ganarles a ellos, que casi no pierdan puntos. Cualquiera le puede ganar a cualquiera”.
Además de ser jugador, Solzi estuvo ligado al futsal femenino como entrenador durante tres años en la etapa formativa previo a que comiencen los campeonatos oficiales. Su paso por Unión Sionista, obviamente que no está cerrado. Nació ahí, se formó como jugador, como persona, y de alguna manera u otra dejó algunos trofeos en la vitrina y pudo devolverle algo de todo lo que a él le dieron. “Es un paso muy alegre e importante en mi vida en el que he ganado, vivido cosas, que siempre voy a recordar y fueron de mis momentos más felices dentro de una cancha”, recalcó.
Mattagnense (Italia) 2017
Su extraordinaria actuación en USAR, hizo que pasara a jugar al viejo continente, más allá de que haya sido un corto trayecto. De enero a abril del 2017 Martín jugó en Mattagnense, equipo de la Serie B de Italia, ubicado en Borgo San Lorenzo, a 20 kilómetros de Florencia. Por una cuestión de papeles, solo pudo estar esos meses y luego volvió al conjunto rosarino para consagrarse nuevamente.
Haciendo hincapié en su paso por el elenco italiano, analizó: “Lo considero muy positivo, creo que me vino muy bien no solamente a nivel futsal sino a nivel cultural, conocer distintas personas, vivir distintas experiencias. Yo no conocía Europa, fue muy enriquecedora para mí”. Además de esto y refiriéndose a lo deportivo, agregó: “Es algo que siempre recuerdo, porque fue una experiencia inolvidable, una vez que volví sumé unas cuestiones tácticas a mi juego que por ahí antes de irme no las tenía”.
Jugar en Europa, más allá del país y categoría que le toque a cada uno, es una vivencia que nunca lo vas a olvidar. “En ese momento, era un torneo en el que jugaban muchos jugadores que habían estado en la selección, que habían jugado mundiales y estaban en la última parte de su carrera. Se volvía muy táctico, se veían muchas mañas, muchas costumbres en los jugadores que no está acostumbrado a ver salvo en gente experimentada que ha ganado tantas cosas”, rememoró Solzi.
Newell’s Old Boys 2018 – 2019
Durante el lapso que representó a Unión Sionista, Solzi fue de menos a más y en el último tiempo en el que estuvo en su máximo esplendor, hizo que pasara a Newell’s en la vuelta a los torneos de AFA. Martín fue el goleador en ambos ascensos consecutivos, como así también de la supercopa que disputaron en 2019 y perdieron la final ante Boca Juniors.
“Bebeco” antes de llegar a La Lepra buscaba la posibilidad de dar un salto hacia Buenos Aires, estaba en contactos con algunos clubes pero en ese momento eran solo charlas informales. En aquel entonces, los del Parque Independencia se acercaron a él, se le comentó el proyecto y entre idas y vueltas se terminó sumando. “No era tan común que haya pase entre los clubes, hoy sí lo es y lo celebro”, confesó.
Relacionando su traspaso y cómo repercute en la actualidad, opinó: “Lo único que puede hacer crecer al futsal es eso, que cada jugador vaya a donde le conviene por el motivo que sea y si hay un proyecto ambicioso, el club tiene intenciones de pelear y al jugador le sirve me parece bueno que se dé. No hay muchos clubes haciendo esto en Rosario, Rowing creo que ha sido el primero”. De todas formas, el jugador aclaró: “A mí en este caso, era para jugar en otra liga, sino creo que nunca lo hubiera aceptado, ya que mi idea en el torneo de Rosario, es jugar en USAR”.
En los dos años que vistió la camiseta del Rojinegro, Martín jugó 70 partidos en Liga Nacional de Futsal Argentina, Copa Argentina, Supercopa, Primera “D” y “C”. En esa cantidad de encuentros oficiales, el ala marcó 62 goles, es decir que cuenta con un promedio de casi un tanto por cotejo.
A raíz de esto, consideró: “Cada uno tiene un rol y tiene que tratar de cumplirlo. A veces el rol va cambiando, pero sea cual sea, lo importante es ayudar de donde toque, es lo que traté de hacer siempre, en algunos momentos pude hacerlo más y en otros menos”. Siguiendo la misma línea, especificó: “En ese entonces me tocaba a mí terminar las jugadas y en ambos años pude ser goleador, que a mí me generó alegría pero no era un objetivo inicial, sino que el objetivo inicial era ayudar al equipo, siempre es ese el pensamiento”.
Los ascensos fueron sueños hechos realidad porque había mucha presión, tanto para jugadores como para cuerpo técnico. “Dicen que el primer ascenso fue fácil y nosotros ascendimos en la penúltima fecha, no fue nada fácil, fue mucho esfuerzo”, declaró. En la última categoría de AFA, ascendía directo solamente el primero de 16 equipos, de cada una de las dos zonas, en un torneo de 30 fechas y finalmente los dirigidos por Gabriel Valarín terminaron conquistando el campeonato.
Con esta consagración, obtuvieron un cupo para disputar la Supercopa con los mejores equipos de Argentina. En cuartos de final, derrotaron a Racing Club que había logrado el ascenso a la máxima categoría. Por semifinales golearon a Villa La Ñata, que venía de conquistar la primera edición de la LNFA y la final fue ni más ni menos que ante Boca Juniors, uno de los mejores del país, que finalmente fue campeón del certamen.
En el torneo anual, pero en esta ocasión comandados por Manuel Basterra, lograron lo que tanto anhelaban. A falta de dos meses para que concluya la competición se encontraban primeros en la “C”, luego se toparon con una racha negativa en la que se cayeron, pero nunca dejaron de luchar. Así mismo terminaron cuartos y pudieron ascender mediante play off ganando dos series consecutivas, una definiendo en Rosario (ante UNLAM) y la otra en Buenos Aires (frente a GEVS).

El jugador cree que probablemente, aunque es difícil realizar una autocrítica, fue su mejor momento dentro de una cancha por el simple hecho de estar compitiendo en un nivel superior. Esto se debe a que la cuarta y la tercera división de AFA, están por encima del futsal rosarino, sumado por el plus de los largos viajes que realizaban cada dos semanas. “Estoy muy contento con mi desempeño en el club, pero los que tienen que hablar son mis compañeros o la gente y cada uno es libre de pensar lo que quiera”, insinuó.
Por su parte, el goleador resumió su paso por Newell’s:
“Fueron dos años hermosos, de mucho sacrificio, mucho esfuerzo, especialmente el segundo año con momentos malos desde lesiones hasta resultados negativos pero por suerte me tocó llegar a Newell’s estando en la D y al momento de irme estaba en la B. Estoy muy tranquilo y muy contento de haber dado el 110% de lo mío, de mi esfuerzo para buscar ayudar al equipo. Cumplí los objetivos, con momentos buenos o malos, siempre di lo mejor de mí y eso me reconforta porque hasta el día de hoy me siguen llegando algunos mensajes de los hinchas recordando esos momentos, que para mí fueron hermosos, junto a ese grupo de jugadores en ambos años que pudimos conseguir cosas increíbles”.
Villa La Ñata 2020
A medida que pasaban los años, la actuación de Solzi era sobresaliente en cada equipo que representaba. En el inicio del 2020, no renovó con el conjunto del Parque Independencia para disputar la segunda división y llegó a un acuerdo con Villa La Ñata. Más allá de haber jugado solo un partido, convirtió dos goles y espera con ansias poder volver a vestir los colores de la Ola Naranja.
“Lo de Villa La Ñata, si bien fue corto y breve, para mí fue hermoso. Se dio todo muy rápido, yo estaba con mucha ansiedad y nervios por la primera fecha, ya que nunca había jugado en la primera división del futsal argentino, era mi debut”, indicó.
El aislamiento preventivo y obligatorio era cada vez más posible, ya nos encontrábamos en una pandemia, pero aun así se llevó a cabo la primera fecha del futsal argentino. Por ese entonces, el conjunto de la localidad de Tigre goleó al multicampeón Pinocho, con dos goles del ex USAR.
La semana previa al enfrentamiento, se encontraba con una molestia en el aductor que venía arrastrando días atrás. Por ese motivo no pudo entrenar hasta dos días antes del cotejo, aunque seguía con el mismo dolor. “Esa noche fue increíble, debutar en la elite del futsal argentino, en el torneo más importante de todo el país, ganar y convertir dos goles ante un equipo histórico como Pinocho, quizá el más grande porque es el más campeón”, evaluó.
Gira con la Selección Argentina en 2016
Uno de los principales deseos que se propone un deportista, ya sea cualquier disciplina, es representar a tu país. Diego Giustozzi, aunque el encargado de dirigir fue Matías Lucuix, conformó una Selección para realizar una serie de amistosos ante Brasil. En conjunto con Tomás Tavella, ex Unión Americana, y cuatro chicos más del interior estuvieron citados para la gira internacional.
“Vestir la camiseta de la selección fue un sueño, la realidad era algo que nunca me había propuesto, pensado ni creía que era posible alcanzar, pero el deporte tiene estas cosas hermosas e impensadas, fue una alegría increíble”, manifestó.
Tuvo el privilegio de compartir vestuarios, entrenamientos y canchas con jugadores como Sebastián Corso, Ángel Claudino y Eduardo Villalva entre otros. “Tengo los mejores recuerdos de aquellas fechas, me acuerdo de todos los compañeros que hoy juegan en la elite, fue una experiencia única, aprendí un montón de cosas”, subrayó.
Actualidad
Actualmente, Bebeco no sabe qué pasará en el futuro, si volverá a Buenos Aires o no. La Ola Naranja tenía un proyecto y por esta situación de público conocimiento que se produjo a fines de marzo, no pudo consolidarlo.
La realidad es que en esta época estuvo entrenando en el gimnasio por su cuenta, esperando a ver qué pasa, pero seguramente este año no tenga la posibilidad de volver a competir. “Mis objetivos para el futuro son seguir creciendo, seguir progresando, seguir jugando. La verdad es una incógnita qué pasará en el futuro, pero sin duda que seguir aprendiendo, creciendo y compitiendo al máximo nivel que se pueda”, cerró Martín.
→ Mirá también “Cuna Del Futsal vs Martín Solzi”.
Carrera como jugador
- USAR (2011 – 2017).
- Mattagnense (2017).
- Newell’s Old Boys (2018 – 2019).
- Villa La Ñata (2020).
Periodista. Cuna Del Futsal